Muy humanos, muy divinos (VII): Nuestro trabajo, levadura de Dios
En este séptimo artículo descubriremos algunas virtudes del trabajo que se esconden en una imagen que usó Jesús: la de aquella mujer que hace pan para muchas personas. El desafío es transformar nuestras tareas diarias en amor para quienes nos rodean.
Muy humanos, muy divinos (VI): Hasta ponerlo por obra
Pararse a pensar, escoger el camino, pasar a la acción. Tres momentos esenciales que dan forma a la prudencia, la virtud necesaria para hacer el bien en el único lugar real: aquí y ahora.
Muy humanos, muy divinos (V): Para poder ser amigos
Toda amistad genuina supone un esfuerzo tanto por entrar en la vida de los demás como por dejar que tengan espacio en nosotros; en este quinto artículo repasamos algunas virtudes que nos lo facilitan.
Muy humanos, muy divinos (IV): Nosotros, el hábitat de las virtudes
Nuestro anhelo de ser mejores se alimenta del clima en el que vivimos y, a la vez, fructifica en las relaciones con los demás.
Muy humanos, muy divinos (III): Buscar los sentimientos de Cristo
En este tercer artículo nos adentramos en el corazón de las virtudes: qué son, cómo orientan nuestra afectividad y por qué nos hacen más libres.
Los demás son nuestros (II): la corrección fraterna
La corrección fraterna es un fruto de la cercanía con la otra persona y supone mirarla con la amplitud con que lo hace Dios.
Los demás son nuestros (I): la corrección fraterna
La amistad y la amabilidad son el terreno fértil de la corrección fraterna; Dios actúa en nuestras relaciones para sacar lo mejor de cada uno.
Un canto de alabanza y amor: el Trium Puerorum
El Trium Puerorum es un canto de alabanza a Dios, que la Iglesia aconseja rezar después de la Santa Misa. La naturaleza entera, con el sol, las estrellas, los rayos, las nubes o los mares, se une a ese canto incoado por tres jóvenes judíos del Antiguo Testamento.
Una invitación siempre abierta. La vocación en el Opus Dei
Cada santo es un proyecto de Dios para llevar el Evangelio a su propio tiempo. ¿Qué aspectos de la vida de Jesús desean encarnar los fieles del Opus Dei?
Muy humanos, muy divinos (II): El camino lo llevamos dentro
Con la fuerza de la fe y la confianza de la esperanza, podemos decirnos: aquí y ahora yo puedo ser luz de Dios, amor de Dios.