Ángela Fortunato
Ángela trabaja en el mundo de la Sanidad en EEUU. En este vídeo explica cómo encontró su vocación como numeraria, y cuenta cómo aprendió a rezar y a aceptar la voluntad de Dios. En inglés, con subtítulos.
Un murmullo en mi corazón
Ángela trabaja en el sector de la Sanidad en EEUU. En este vídeo explica cómo encontró su vocación como numeraria, y cuenta cómo aprendió a rezar y a aceptar la voluntad de Dios. En inglés, con subtítulos.
“Muchas personas tienen sed de Dios”
D. Gregorio tiene 32 años y es el párroco de la Parroquia de Nuestra Señora de la Oliva y San José Obrero, situada en la localidad de Dos Hermanas (Sevilla)
Entre sartenes en Paysandú
Belén Mazzili, ex alumna de la Escuela de Hotelería y Gastronomía Del Plata, trabaja en un restaurante de Paysandú (Uruguay) y relata cómo aprendió a santificar su trabajo.
Una vida al volante
Francisco Benítez se pasa la vida al volante. "Tengo mucho tiempo para pensar y para rezar mientras conduzco" cuenta este conductor de Jaén, casado y con una hija. (11.6.09)
Una serie de casualidades
"¿Pedir fe?, yo creo que o se tiene o no se tiene. Esas cosas no se piden. ¡Pídela!, insistía la voz interior. Bueno, por intentarlo..." África cuenta en este testimonio algunas "casualidades" de su vida.
24 horas al día, 365 días al año
Don José Carlos González Sánchez, madrileño de Carabanchel, es párroco de la Encarnación del Señor en el distrito de San Blas. (5.6.09)
24 horas al día, 365 días al año
Don José Carlos González Sánchez, madrileño de Carabanchel, es párroco de la Encarnación del Señor en el distrito de San Blas. Hablamos con él de su capilla de adoración eucarística perpetua, y de más cosas.
“Una peluquería con buen marketing”
Estamos en la calle Mayor, una de las calles con más solera y tradición de Pamplona. Entre tiendas de recuerdos para turistas y establecimientos “de toda la vida”, está la peluquería de Lourdes Arriazu.
John Kuria (Kenia)
John Kuria tiene 29 años. Nació en Nairobi (Kenia), y estudió "Computer Science" en la University of Nairobi. Tras cinco años en Roma, recordar su país le ayuda a pensar sobre la vocación a la que Dios nos llama.